TIN TAN…
EL PACHUCO DE ORO
Su nombre de pila, su nombre serio como diría el mismo Tin Tan: Germán Genaro Cipriano Gómez Valdés Castillo. Había nacido en México, Distrito Federal, el 19 de septiembre de 1915, falleció en un frío día, el 29 de junio de 1973, a eso de las 8 y 50 de la mañana.
En las reminiscencias de la adolescencia nos encontramos viendo las viejas películas del cine mexicano, en el Teatro México en Cali o en el Teatro Ángel de Tuluá, al igual que en otras salas de cine en el mundo que sólo presentaban películas del cine Azteca. Vivimos las historias de grandes cómicos y actores violentoamorosos, que ganaban un duelo a muerte y luego besaban a la coprotagonista, de la que por supuesto en la febril inexperiencia de los nóveles espectadores, todos moríamos de amor por ella.
Pero inmerso en esas películas nos llegaba de México el gran “Tin Tan", un actor cómico como el que más, que le añadía a su talento el gran carisma como excelente cantante y bailarín. Lo uno no quitaba lo otro. También era indisciplinado, bohemio, mujeriego y de una impuntualidad que rayaba en la grosería. Sin embargo se le perdonaba todo.
Proveniente de una familia de talentosos e inteligentes comediantes. Su hermano Ramón Valdés Castillo, que alcanzara la fama inmortal en una de las importantes obras de Roberto Gómez Bolaños, “El Chavo del ocho”, interpretando el papel de “Don Ramón”. Su otro hermano Manuel “El Loco” Valdés, famoso por programas como Operación Ja - Ja, Ensalada de locos, El show del Loco Valdés y La hora del Loco Valdés.
A su familia biológica adicionó un nuevo miembro, pues escogería entre sus amigos a un hermano más para su vida, Marcelo Chávez, al que llamaba “Mi Carnal” con quien grabó, bailó y literalmente le “mamó gallo a todo el mundo”
Contrajo matrimonio tres veces: con Magdalena Martínez, con Micaela Vargas y con Rosalía Julián. Con cada una de ellas tuvo dos hijos.
En la barriada de su juventud se inmiscuyó con grupos de muchachos que en su rebeldía y original identidad, vestían con pantalones anchos ceñidos a la cintura, grandes sacos que llegaban casi hasta las rodillas, adornando sus cabezas con sombrero de fieltro italiano. A la vestimenta se sumaba una forma diferente de expresar el lenguaje, mezclando el inglés con el español y una manera de bailar que francamente robaba la atención de jóvenes y mayores de la época. A estos jóvenes se les llamaba los “Pachucos” y precisamente Tin Tan al vestir y actuar como ellos se convirtió en su ícono, representando toda esa época de los años 40 y 50, llegando a ser considerado por la misma juventud como el “Pachuco de Oro”
Tin Tan fue uno de los más grandes actores de la cinematografía mexicana, sin embargo hoy queremos destacar sus grandes dotes para el canto, su estilo en algo lastimero y en algo alegre, y su forma cómica de encarar la dicción de cada una de las letras de las canciones interpretadas en sus películas.
Nadie cantó “Bonita” como Tin Tan, a tal punto que el mismo compositor, el pianista y director de orquesta mexicano Luis Arcaráz, decía que la interpretación más bella de su obra había sido grabada en la voz de Germán Valdés.
Los LP´s “Mi Antología” el No. 1 y el No. 2, así como el LP “Tin Tan, Éxitos de sus Películas” y “20 Éxitos de Tin Tan”, representan un etilo diferente de interpretar canciones “serias” con la tesitura de la voz de un talentoso y consumado actor cómico.
Canciones como “Personalidad”, “Piel Canela”, “Contigo”, “Bonita”, “La Barca de Oro”, Ya tú verás”, “En un Bosque de la China, “La Gloria eres Tú”, “El Relicario”, “El Bodeguero” y “Fumando Espero” entre otras, hacen parte del tesoro de colección que dejó para la posteridad el gran Germán Valdés, Tin Tan.
